El gobierno confirmó que vetará el financiamiento universitario que aprobó el Congreso pero hay rumores de que buscará entregar fondos para sueldos para frenar la marcha del 2 de octubre que se prevé multitudinaria.
La estrategia del gobierno con el tema de las universidades está partida de manera visible. El contador de la UADE, Manuel Adorni, confirmó en su conferencia de prensa diaria que Milei vetará el financiamiento de las universidades públicas.
Horas después de esa confirmación, Sandra Pettovello y Carlos Torrendell publicitaron una reunión con el titular de la Sigen, Miguel Blanco, para avanzar con las auditorías a las universidades nacionales. Es la manera que encontró la ministra presionar a los rectores.
Pero por la tarde la ministra de Capital Humano se trasladó a la Rosada junto al secretario de Educación para reunirse con el jefe de gabinete, Guillermo Francos, en busca de un artilugio para frenar la movilización.
No estuvo Santiago Caputo, quien como anticipó LPO se corrió de la negociación con los rectores para dejar expuesta a Pettovello y propiciar su salida si la marcha vuelve a tener un volumen como la de abril.
De esa reunión se desprendieron las versiones de una suba de salarios para bajarle el tono a la marcha a la que ya se sumó la CGT. En la UBA dijeron a LPO que no tienen información de una suba de sueldos pero no la descartan. “Sería de manual”, dijeron las fuentes.
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